El Imperio Inca
El Imperio Inca
Xavier Albó
No son bien conocidos los orígenes de nuestros antepasados los Incas. El mito dice que el primer Inca, Manco Kapac, surgió en la isla del Sol, en el lago Titicaca, en la actual Bolivia.
Pero lo que sabemos con certeza es que hacia el año 1400 de nuestra era un grupo del Cuzco, en el actual Perú, comenzó a organizarse mejor que los demás. Eran los primeros Incas.
Los Incas fueron un pueblo guerrero. Conquistaron muchas tierras hasta formar el gran Imperio de Tawantisuyo. Se llamaba así porque estaba dividido en cuatro «suyo», es decir, cuatro Estados: el Chinchasuyo, el Kuntisuyo, el Antisuyo y el Kulhasuyo. Abarcaba los territorios que hoy son Ecuador, Perú, Bolivia, el norte de Chile y el norte de Argentina.
Valoraban mucho los bienes comunitarios. La producción de las tierras de cada comunidad era dividida en tres partes: una para las necesidades del Inca e incluía el sustento de sus ejércitos y funcionarios; otra para la manutención de los sacerdotes que trabajaban en los templos; otra para el sustento de la comunidad.
No tenían escritura como la nuestra, pero controlaban el número de habitantes y la cantidad de producción a través de nudos, hechos en cuerdas, llamados «kipu». Así sabían lo que poseían y lo que necesitaban. Se comunicaban de una ciudad a otra a través de los «chaski», que eran correos que llevaban mensajes de los gobernadores y dirigentes.
Construyeron puentes y carreteras tan buenas como las del Imperio romano. Construyeron también muchos cuarteles y fortalezas llamadas «pukara», enteramente hechos de piedra, como todavía hoy se puede ver en las famosas ruinas del Machu Pichu, en Perú.
Los Incas buscaban el bienestar de todos, pero había una desigualdad entre el pequeño grupo que gobernaba y la mayoría del pueblo que les obedecía en todo. La sociedad incaica era como una pirámide: encima estaba el Inca, con sus parientes y los sacerdotes, que no trabajaban y sólo mandaban. En la base de la pirámide estaba el pueblo, que con su trabajo mantenía a los de encima.
El Imperio incaico duró poco tiempo, de 1400 a 1532, cuando fue dominado por los españoles.