La banana

La banana, la primera


La completa diversificación en las ventas de fruta es una posibilidad a largo plazo, pero por ahora el comercio está concentrado en unas pocas especies, encabezadas por la banana. Ésta, no sólo mantiene la posición de principal producto en el comercio mundial, sino que aumenta su ventaja respecto a la naranja, la mandarina, la manzana y la uva.

La cantidad media anual de frutas frescas vendidas en el mercado mundial fue de 26 millones de toneladas en el período 1989/93. La tendencia en ese lapso de tiempo fue de crecimiento (18%), pasando de 23’6 a 27’9 millones de toneladas. La banana, con 10 millones de toneladas (más de 38%), la naranja y mandarina, con 5’7 millones (22’1% más), la manzana, con 3’9 (14’8% más) y la uva, con 1’7 millones (6’4% más), son las principales frutas. Así, juntas, la banana, la naranja, la mandarina y la mazana representan más de las tres cuartas partes del total del volumen vendido.

El valor de los negocios internacionales de frutas frescas alcanzó la media de 14 millardos de dólares, pasando de 11’3 en 1989 a 14’1 millardos en 1983.

El mal sabor del proteccionismo europeo

PANAMA.- Los países productores de banano son afectados por las restricciones que aplica la Unión Europea a las importaciones. La UE impuso sus medidas proteccionistas en 1994, poniendo en aprieto a varios países latinoamericanos.

La UE permite un ingreso de 2 millones de toneladas de banano anuales a su mercado. Europa estableció además un fuerte incremento de impuestos de cuando las importaciones superan el tope.

Honduras tuvo que reducir el impuesto de exportación bananera, para poder ayudar a sus productores y no logra recuperarse de la caída del 27 por ciento que sufrieron sus exportaciones en 1994, cuando la Unión Europea impuso sus reglas.

En Panamá el comercio de la fruta se redujo en un 9% en el primer semestre de 1994. Guatemala, Ecuador y Nicaragua también experimentaron una merma en sus ventas.

Plaguicidas con sabor y forma de banano

SAN JOSE.- Costa Rica deberá decidir si termina con la producción intensiva de banano, o continuar pagando un costo ambiental muy elevado.

La situación se planteó tras una investigación que confirmó que la pérdida de más de 3.000 hectáreas de bosque entre 1990 y 1992 fue debido a la expansión bananera ocurrida en esos años.

Costa Rica es el país con la más alta productividad de banano por hectárea y el segundo exportador mundial, después de Ecuador, pero esa eficiencia se ha logrado a costa del ambiente ecológico, ya que se recurre a una gran cantidad de agroquímicos para el control de plagas.

En sólo 52 mil hectáreas sembradas de banano (el 1% del territorio nacional), el país exporta más de cien millones de cajas de banano de 18 kg.

Tal productividad ha convertido al país en uno de los mayo-res consumido-res de plaguicidas por habitante.

En las zonas bananeras de Costa Rica, con acumulaciones de pesticidas 10 veces más altas de lo permitido en el agua corriente, la tasa de intoxicación laboral también está entre las más altas del mundo.