Proverbios africanos
PROVERBIOS AFRICANOS
La potencia del hacha está en el mango.
La potencia del arco está en la cuerda (MONGO).
Una sola mano no basta para subirse a una palmera (BANEM).
Un solo dedo no puede atrapar un piojo (ABE).
Un solo brazalete no hace ruido (PEUL).
Un solo pie no basta para saltar una zanja, ni para trazar un sendero (BAMBARA).
No lapidéis al mensajero (BAMILEKE).
Puesto que el corazón no es la rodilla, no es lógico que se doblegue (PEUL).
Las modas duran lo mismo que las fases de la luna (URUNDI).
Cuando se es rico siempre se baila bien (RUANDA).
La enfermedad llega cabalgando un corcel y se aleja montada sobre una tortuga (BAMBARA).
Lo que el viejo ve por estar sentado, no lo percibe el joven que está de pie (BAMBARA).
Quien siempre dice la verdad, se pasea con su propia mortaja (BAMBARA).
Aunque la mentira se pusiera en camino con 10 años de ventaja, la verdad le daría alcance en una sola mañana (PEUL).
La gallina sabe cuándo amanece, pero espera el canto del gallo (RUANDA).
Cuando el leopardo está ausente, la gacela baila (CONGO).
Más vale que los dientes no riñan con la lengua (BAULE).
Si echas de tu casa a la gallina mala, vigila que la buena no se vaya tras ella (BAULE).
El carcelero es un prisionero más (BAMILEKE).
El extranjero no ve, aunque tenga los ojos abiertos (BAULE).
Si avanzar es morir y retroceder es morir, más vale avanzar y morir (ZULU).
El arquero no vino al mundo con arco (ASHANTI).
No se puede obtener miel sin embadurnarse los dedos (MALINKE).
Dios da, nunca vende (URUNDI).
Cuando dos elefantes riñen, la que se lamenta es la hierba (SUAHILI).
Si deseas que las moscas se aparten de ti, arroja lejos el hueso que tienes en la mano (FULFULDE).
El ojo no lleva carga, pero sabe cuánta puede soportar la cabeza (WOLOF).
No debes sentarte en una estera y maldecir las hojas de la palmera.
Nadie nota el olor de su sobaco.
Desde lo alto, el cucharón no ve la salsa que hay en el fondo de la taza.
Si quieres cruzar el desierto, debes recurrir al dromedario.
La blancura del plumaje de la garza no impide que su carne sea azul.
Todo lo putrefacto ascenderá a la superficie del agua.