Vivimos en el cuerpo de la Pachamama

Vivimos en el cuerpo de la Pachamama


-Poema de Carlos Yujra, yatiri aymara, de La Paz, Bolivia. Recogido en Yavi, Humahuaca, Argentina, por Manuel Pliego, de boca de Víctor Bascopa, indígena kolla, en un taller de Espiritualidad Andina.

«La Tierra es la carne de la Pachamama, donde podemos sembrar.

Los cerros son la cabeza de la Pachamama.

Los antigales* son los oídos de la Pachamama donde llevamos nuestras ofrendas

Las plantas son los vestidos de la Pachamama.

El monte, los bosques, son el cabello de la Pachamama.

El viento es la respiración de la Pachamama.

Las aguas que corren son la sangre de la Pachamama.

Los trabajos, pensamientos y sabiduría que nosotros generamos, son las manos de la Pachamama.

Los años son los pies de la Pachamama.

Los productos alimenticios frutas, maíz, papas, son los pechos de la Pachamama, porque de ella nos alimentamos.

La vida que ella nos regala -y por eso estamos vivos-, es el vientre de la Pachamama.

Las enfermedades son los desechos de la Pachamama.

Las semillas son la fertilidad de la Pachamama, su feminidad.

La muerte son las uñas de la Pachamama.

Las semanas son los dedos de sus manos de la Pachamama.

Los meses son los dedos de los pies de la Pachamama.

Los lagos y los mares son la boca de la Pachamama.

Los cerros nevados son los dientes de la Pachamama.

Las piedras y las rocas son los huesos de la Pachamama.

El arco iris es la wiphala de colores la bandera de la Pachamama.

Los animales silvestres son sus criaturas queridas.

Las aves son las mensajeras de la Pachamama.

Los seres humanos somos los hijos más queridos de la Pachamama».

*Antigal: lugar de los antiguos, restos arqueológicos de los ancestros.